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El jugador de Boca negó los cargos que se le imputan y aseguró que le pidieron plata para no denunciarlo.
El delantero de Boca Juniors, Sebastián Villa, declaró este jueves por la causa en la que se lo acusa de abuso sexual con acceso carnal contra su expareja. Por el contrario, afirmó que intentaron extorsionarlo, pidiéndole dinero a cambio de no denunciarlo. Dijo que para eso, la mujer le mostró una foto con una nalga moretoneada.
Además, el futbolista aseguró que las relaciones que tuvo con T (su presunta víctima) fueron consentidas". "Yo no cometí el hecho que me leyó", sostuvo.
"Yo conocí a T en el año 2020 en una de las fiestas que hacía un compañero mío de Boca Juniors. En total fueron unas ocho o nueve veces que tuvimos relaciones consentidas", explicó ante la fiscal Vanesa González.
Además, Villa agregó que su seguridad personal, apodado Vikingo, llevó entre quince y veinte chicas como "presencia" a una fiesta, quienes afirmó que fueron de "onda".
Después bailar con T, dijo que tuvieron relaciones sexuales y que esa misma noche más tarde él se besó con Florencia, la testigo que en esa misma ocasión dijo que el jugador la agredió cuando quiso tener relaciones sexuales con ella sin usar preservativo.
Según su versión fue T quien luego de esa noche lo volvió a buscar y le empezó a pedir ayuda, más concretamente trabajo.
"Después de eso, ella me mostró una foto de una nalga morada, yo le pregunto qué le pasó ahí, entonces ella me dice que puede decir que había sido yo y que con eso me arruinaba la carrera", indicó y añadió: "Le pregunté en qué ayudarla y me dijo 'en mis cosas'. Entonces le digo 'T, tú sabes que yo siempre te hable claro, siempre fuimos amigos, no sé por qué lado te estás metiendo'".
Sobre los chats y fotos que le exhibió la fiscal, el jugador dijo que las correspondientes a los golpes son otro momento posterior a esa noche y del que él no tuvo participación.
"Vikingo me dijo que se habían ido a otra fiesta, probablemente se lo haya hecho otra persona", agregó.
En cuanto a los chats que hubo entre la denunciante y el jugador en privado por Instagram, aclaró que su cuenta verificada es otra, no esa que expuso la víctima.
